Aunque seamos ciudadanos de
a pie de poco roce con las intricadas y
difusas explicaciones de los economistas que colman la opinión pública nacional
para explicar las causas y consecuencias de los acontecimientos económicos, eso no nos exime de las implicaciones
negativas o positivas que tomen en esta materia los diferentes agentes de
decisión, públicos o privados. De acuerdo al ABC del Banco Central de Venezuela
en lo que respecta a las Reservas Internacionales dice lo siguiente ; “Son los recursos financieros
en divisas con los cuales cuenta un país para garantizar los pagos de los
bienes que importa y el servicio de la deuda, así como para estabilizar la
moneda“.Esta
definición nos señala que las Reservas Internacionales son recursos financieros
en divisas, entendiéndose por tales: Moneda extranjera que refiere a la unidad
monetaria de un país, en general representa el fondo para pagar las
importaciones. Estas divisas generalmente están compuestas por depósitos en
moneda extranjera, dólares o euros, así como también por otros tipos de
activos, como el oro o los Derechos Especiales de Giro o DEG el cual es un
activo creado en 1969 por el Fondo Monetario Internacional para complementar
las reservas de los países miembros. En lo referido a garantizar los pagos de los bienes importados podemos decir
que es el que más nos afecta, porque en los mercados internacionales se compra
en dólares o euros y para realizar las
transacciones con otros países las personas naturales o jurídicas deben primero
intercambiar la moneda nacional por las divisas en el Banco Central de Venezuela.
Este punto es tan importante que muchas
veces se habla de las Reservas Internacionales no en términos del monto
monetario de las mismas sino de la cantidad de meses de importaciones que
podría pagar un país
con ellas. Cuando el
nivel de Reservas Internacionales disminuye, los recursos destinados a la compra
de bienes importados también lo hace y en consecuencia se reduce la entrada de
productos comprados en el exterior, provocando el aumento de los precios de
dichos bienes debido a la poca oferta. De allí que actualmente existe una
terrible escasez en el país, en la industria farmacéutica, automotriz, de línea
blanca y lo más grave en el rubro alimenticio. La principal causa de la escasez
de divisas es que somos un país con un nivel reducido de exportaciones, solo
dependemos del barril de petróleo, por lo que la balanza internacional no
reporta suficientes ingresos de divisas extranjeras produciendo un
desequilibrio casi imposible de corregir.
La
conclusión a la que hemos llegado es que el modelo económico aplicado en
Venezuela fracasó, ningún país ha salido adelante sin el concurso del sector
privado y los trabajadores. Destruir el aparato productivo y expropiar las
empresas respondiendo a un absurdo ideológico está demostrado que no es el
camino.
Economista José
Luis Alcocer