jueves, 5 de julio de 2012

MERCOSUR LABORAL


Desde el punto de vista laboral Venezuela llega con una” pata coja” a MERCOSUR. La integración es un proceso a través del cual dos o mas mercados nacionales con características distintas se unen para conformar un solo mercado de características lo mas homogéneas posible. Para alcanzar este propósito, es preciso realizar una serie de actuaciones de acoplamiento de las estructuras nacionales, a fin de llegar con el mínimo coste social al ámbito que se pretende integrar. Ello exige normalmente un periodo transitorio más o menos largo, a fin de evitar planteamientos demasiado bruscos o drásticos. Ese periodo transitorio es el propio periodo de integración, a lo largo del cual, por lo menos a partir de unas condiciones previamente establecidas, se hace prácticamente indispensable la transferencia de una parte de las soberanías nacionales a unas instituciones comunes que adquieren con ello un carácter supranacional. En otras palabras, para lograr una verdadera integración económica es necesaria una base de política supranacional. Por esa razón, los procesos de integración económica tienen ir forjándose con decisiones políticas conjuntas entre los países signatarios. El proceso de integración puede revestir diferentes formas, presentando, según los casos, ventajas e inconvenientes. Las posibles formas de integración económica podríamos enumerarlas así: a) sistema de preferencias aduaneras b) zonas de libre comercio c) Mercado Común d) uniones aduaneras e) unión económica y Monetaria. La Unión Europea tardo 40 años en acoplarse; MERCOSUR tiene 27 años construyendo la integración en el sur. Inicialmente, la estructura original del MERCOSUR no contemplaba ningún ámbito para tratar cuestiones sociolaborales, desde sus inicios, los sindicatos del MERCOSUR representados por la Coordinadora de Centrales Sindicales del Cono Sur (CCSCS) pugnaron por crear espacios tripartitos para analizar, debatir y decidir mediante el diálogo social regional, el impacto que la integración tendría sobre los mercados de trabajo y las condiciones socio-laborales. A partir de 1995 se creo definitivamente el Sub Grupo de Trabajo 10, el cual tiene un ámbito tripartito (Ministerios del Trabajo, empleadores y sindicatos). Hasta ahora esta instancia ha generado una fructífera cultura subregional de dialogo social originando lo que hoy se conoce como MERCOSUR Sociolaboral. Por estas razones el Gobierno Venezolano tendrá que rendir cuentas en MERCOSUR por haber eliminado el dialogo tripartito de la Nueva Ley del Trabajo, tendrá que rendir cuentas por la no discusión de las Convenciones Colectivas, por la criminalización de la protesta, por las persecuciones sindicales y en definitiva por haber promovido la proliferación de sindicatos paralelos.