Los trabajadores de Guayana no queremos migajas

Los trabajadores de Guayana no queremos migajas. La decisión del Presidente Chávez de asignar unos recursos precarios para las Empresas Básicas es una demostración del poco interés del Ejecutivo Nacional de acometer una verdadera y efectiva recuperación del otrora emporio industrial Guayanés.
Asignar 564 Millones de Bolívares, cuando se necesitan mas de 12.000 millones de Bolívares para recuperar las empresas, es una burla, es como lanzarle un vaso con agua al océano.
Ya no basta con pensar en una recuperación del aparato productivo. Las empresas han caído en un estado de deterioro que ahora es imprescindible desarrollar un plan que transforme el modelo económico, que vaya desde el actual status paternalista hacia una economía productiva y rentable y para lo cual debe existir la voluntad política de los actores y fundamentalmente del Gobierno.
El problema del desempleo no se puede seguir solucionando con el abultamiento de las nominas existentes en unas empresas cada día mas improductivas, esa política esta signada por los vaivenes del mercado petrolero. Actualmente son pocas las empresas estatales que pueden responder a sus propios costos laborales y de inversión, todo depende del precio del barril de petróleo.
El presidente lo que tiene que hacer es dejar de regalarle el mineral de hierro a los “hermanos chinos” y mas bien impulsar un proyecto ambicioso de capacitación de nuestra gente y un programa de investigación tecnológica que nos permita avanzar hacia la consolidación de pequeñas, medianas y grandes empresas de transformación de nuestra materia prima en productos acabados.
Las propuestas abundan, solo que el Gobierno pretende erigirse como el dueño de la verdad, sin percatarse que para que haya un ambiente de armonía, tiene que haber dialogo, tiene que reconocer a los representantes genuinos de los trabajadores y tiene que reconocer la necesidad de incorporar al sector privado bajo un marco de seguridad jurídica que pueda generar confianza en los inversionistas.
Mientras el Gobierno actúe con pañitos calientes, sin un plan coherente, el desempleo y la inflación seguirán golpeando a las clases mas necesitadas. Por nuestra parte los trabajadores seguiremos cumpliendo con nuestra responsabilidad, en nuestro sitio de trabajo y al mismo tiempo en campañas de concienciación en la búsqueda de una salida democrática y constitucional, articulando nuestras principales armas que son la protesta y la libertad de expresión.
José Luis Alcocer, Coordinador de UNIDAD MATANCERA en SIDOR.