En el día
de ayer, 03 de Mayo, el Presidente Maduro anunció la juramentación del consejo presidencial de la salud pública,
“como la máxima instancia de gobierno del plan de salud”. Después de 18 años de gobierno
socialista del siglo XXI, es pertinente hacer algunas precisiones sobre el tema
de la salud, en algunos aspectos que desde hace tiempo es difícil conocer las
estadísticas porque se niega la información. Entre 2009 y 2014, se redujo en 10.143 el número de camas
operativas en los hospitales públicos, pasando de 30.964 a 20.821.. Según la
Oficina Panamericana de la Salud (OPS), el número de camas en Venezuela es
de 0,9 x1.000, siendo el estándar
recomendado 3 camas x 1.000 habitantes. En hospitales públicos, la Red de
Médicos por la Salud reportó para el mes de marzo de 2015 un 67% de 130
hospitales con fallas graves o absolutas de medicinas. Entre las personas más
afectadas se encuentran se encuentran: 6.000 personas con problemas renales que
requieren de diálisis y no reciben las condiciones mínimas de atención; 1.500 personas con cáncer se encuentran afectadas por falta de
reactivos y fármacos de medicina nuclear; 560 personas con linfoma afrontan
falta de medicamentos indicados en protocolos de tratamiento de quimioterapia; 5.000 mujeres diagnosticadas con cáncer de mama no consiguen todos los medicamentos esenciales de forma
continua; 4.443 personas con hemofilia y otros problemas hematológicos; 10.000 personas con problemas de salud mental ; 5.000
personas en lista de espera por trasplantes. Entre2011-2014,
la malaria aumentó 96%, pasando de 45.824 a 89.822 casos, concentrándose en el
estado Bolívar 87,7% de los casos. Estos son algunos de los casos más
emblemáticos. En otro aspecto de incidencia y de responsabilidad directa al
actual gobierno es el desabastecimiento
de alimentos, ante lo cual la Asamblea Nacional Democrática aprobó un voto de
censura en contra
del Ministro de Alimentación Marcos Torres, provocando la
reacción inmediata del Presidente de la Republica quien a través del decreto Nº
2.309 ordenó restringir las mociones de censura que pudiera acordar la Asamblea
Nacional contra los Ministros o en contra del Vicepresidente Ejecutivo, sencillamente
porque un voto de censura significa la remoción inmediata del funcionario. De
acuerdo a los diputados oficialistas y el propio Presidente de la Republica en
Venezuela todo está bien en materia de salud y alimentación. Para el gobierno
no existen las colas del hambre, las farmacias están repletas de medicinas y
los hospitales funcionan al máximo de su capacidad. Al pueblo, que sufre, que
padece, solo le queda el arma más poderosa de un sistema democrático, el voto,
su opinión y la voluntad para activar la vía cívica, constitucional y electoral
para salir de este gobierno.
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